PortadaPhoto: Camila Cunha

Vigor a los 70 años

Las siete décadas de la Universidad se rescatan y las apuestas en el futuro se presentan 70

La primera universidad marista en el mundo nació de la obstinación de un hombre. Hno. Afonso (Charles Herbaux), un religioso de espíritu emprendedor y visionario, fue el responsable, con sus fieles colaboradores, por el gran emprendimiento universitario en el Sur de Brasil: la creación de la PUCRS, que empezó a tomar forma en los años 1930.

Brother Afonso, founder of the Universityz

En 1927, Hno. Afonso asumió la dirección del Colegio Rosario y fundó el Instituto Superior de Comercio. El primero reconocido en el Sur del País sería el embrión para que más tarde se constituyese la PUCRS. La institución pasó a sobresalirse en la formación de peritos contadores. A pedido de los alumnos que deseaban seguir sus estudios en nivel universitario, pero que no tenían cómo hacerlo porque no había, el Hno. Afonso creó el Curso Superior de Administración y Finanzas, en marzo de 1931, con nueve estudiantes. Tres años después, el curso integraría la Facultad de Ciencias Políticas y Económicas.

NUEVAS FACULTADES

Edificio de la Plaza Dom Sebastião, donde la PUCRS funcionó de 1944 a 1967

La semilla estaba plantada. Así como la creación del primer curso superior atendió una necesidad social, la caminada de los maristas, conducidos por la visión de Hno. Afonso, siguió puntillada de progresos. Nuevas exigencias sociales generaron nuevas respuestas y así se crearon la Facultad de Filosofía, Ciencias y Letras (1940), la Escuela de Trabajo Social (1945) y la Facultad de Derecho (1947). Con las cuatro Facultades y la colaboración de Hno. Faustino João y de los profesores Eloy José da Rocha, Elpídio Ferreira Paes, Salomão Pires Abrahão, Francisco Juruena, Hno. José Otão y Antônio César Alves, entre otros, la União Sul-Brasileira de Educação e Ensino, entidad civil de los hermanos maristas, solicitó al Ministerio de la Educación la equiparación de universidad.

Cuando el mundo vivía con alivio el período posterior al final de la 2ª Guerra Mundial, en 1947 los maristas Hno. Afonso y Hno. Faustino João empezaron a trabajar con empeño en la idea de construir una universidad. Por el Decreto nº 25.794, del 9 de noviembre de 1948, firmado por el presidente Eurico Gaspar Dutra, las Facultades pasaron a constituir la Universidade Católica do Rio Grande do Sul. El 8 de diciembre de 1948, el arzobispo de Porto Alegre y canciller de la Universidad, Don Vicente Scherer, dio posesión a la primera administración para el trienio de 1948 a 1951, que tuvo al frente el rector Armando Câmara y el vicerrector Hno. José Otão. El título de Pontificia vendría en 1950.

TIEMPO DE EXPANSIÓN

La trayectoria de éxitos conquistada hasta entonces también estuvo marcada por dificultades administrativas y financieras. Había algo de temor en la cumbre por el surgimiento de la enseñanza universitaria en el Sur de Brasil, hecho singular en la obra educacional de Marcelino Champagnat.

Pero en nada disminuyó el entusiasmo y la fe de los hermanos gauchos. La alegría de la nueva conquista no enfrió el trabajo para conseguir el título de pontificia – institución que sigue la orientación filosófica y la doctrina de la Iglesia Católica.

PONTIFICIA

Con el apoyo del arzobispo Don Vicente Scherer, el papa Pío XII firmó el decreto que daba esa denominación a las Facultades católicas. El 7 de marzo de 1951, se instalaba solemnemente la PUCRS, la tercera pontificia de Brasil. La distinción reconoce la contribución de una institución universitaria para al bien de la Iglesia en lo que se refiere a la formación superior.

En los años siguientes, nuevos proyectos de Facultades se concretaron y programas volcados no solamente hacia la enseñanza, sino también a la comunidad, a las ciencias, a las artes y a la conservación del medio ambiente se volvieron metas. Y una obra grandiosa, que cambiaría el escenario de la enseñanza superior de la Capital, empezaría a concretarse.

NACE EL CAMPUS

1968: primeros edificios en el nuevo Campus

En 1954, Hno. José Otão asumió como rector (1954-1978) y recibió una PUCRS relativamente pequeña y llena de grandes problemas: en la estructura institucional, en el espacio físico, en la fijación y calificación del cuerpo docente. Con su método de trabajo claro y rápido, solidificó la estructura, reafirmó la fuerza de la mantenedora y decidió transferir la Universidad del Centro del Porto Alegre al Campus, ubicado en una chácara de los maristas, en el mismo terreno del Colegio Champagnat, en el barrio Partenon.

En marzo de 1957, se lanzó la piedra fundamental de la Facultad de odontología y, 11 años después, el presidente de la República Costa e Silva inauguró la Ciudad Universitaria. La transferencia de las Facultades para el Campus Central empezó en 1960.

Los primeros grupos de estudiantes enfrentaron la precariedad de transportes y los obstáculos de las obras pioneras. En abril de 1962, se inauguraron los edificios de la Facultad de Odontología y de la Escuela de Ingeniería. A medida que las construcciones quedaban listas, otras unidades eran transferidas. En las décadas siguientes, la PUCRS creció y se firmó en un ambiente rodeado de verde y sosiego. La Universidad difundió su imagen de institución de enseñanza e investigación, calificada entre las mejores del País, punto de referencia en varias especialidades y conocida en cinco continentes.

Un hospital escuela

En 1970, con la creación de la Facultad de Medicina, surgió la necesidad de construir un hospital escuela, campo de prácticas para el grado y posgrado. Después de estudios de necesidades y del plan director, las obras empezaron en 1971 y la inauguración del Hospital São Lucas (HSL) ocurrió en octubre de 1976. Fue el primer emprendimiento del instituto de los Hermanos Maristas en el mundo. En el final de 1988, la PUCRS lanzó el Centro Clínico, espacio innovador que unió el HSL y consultorios de médicos que también actúan como profesores.

Renovación para ele futuro

En la historia, 1978 fue marcado por la posesión de Juan Pablo II como el tercer papa en tres meses y por el milagro en la medicina: el nacimiento del primer bebé de probeta en el mundo, Argentina levantaba el trofeo de campeona mundial de fútbol y las pistas de las discotecas hervían, inspiradas en John Travolta. Aquel año, la PUCRS daba un paso importante para alcanzar la excelencia que tiene en los días actuales. Bajo la mano firme de su nuevo rector, Hno. Norberto Rauch, la Universidad empezó a trazar el camino seguro para realizar grandes proyectos de futuro, hoy presentes.

Con increíble capacidad emprendedora, Rauch llevó a cabo obras grandiosas de las cuales los gauchos se enorgullecen: el Tecnopuc, referencia como Parque Tecnológico; el Museo de Ciencias y Tecnología, destaque por sus experimentos interactivos en varias áreas del conocimiento; el Parque Deportivo, por su capacidad de agregar innumerables modalidades deportivas; la nueva Biblioteca Central, una de las más completas de América Latina, además de otros espacios destinados al desarrollo del saber.

MIL PARA 2000

En sus 26 años de rectorado (1978-2004), la PUCRS dio un salto cualitativo. El foco en el cuadro docente, de investigadores y técnicos administrativos fue otro factor decisivo. Después de enfrentar un desequilibrio financiero en el período del régimen militar, se pudo corregir el desfasaje en el sueldo de los colaboradores, proporcionar beneficios y avanzar hacia una profunda transformación. Un programa de titulación y calificación docente tuvo inicio en la década de 1980.

El movimiento tomó grandes proporciones y, en 1991, se lanzó el desafío Mil para Dos Mil. La meta era llegar al año 2000 con mil profesores titulados con maestría y/o doctorado. En el libro Trajetória de um período: 1978-2004, Rauch comenta sobre el éxito del plan. “La respuesta del cuerpo docente fue óptima. Sobrepasamos la meta establecida antes del plazo estipulado.”

MUNDO CONTEMPORÁNEO

Al avistar el siglo 21, el esfuerzo colectivo pasó a centrarse también en el compromiso de formar personas y no solamente profesionales. Personas capaces de respetar principios y valores imprescindibles a la construcción de una sociedad justa y fraterna, marca del fundador del Instituto Marista, San Marcelino Champagnat. En 2004, ante los grandes desafíos del nuevo milenio y con la misión de mantener los fundamentos de la institución educativa, Hno. Joaquim Clotet asumió como rector (20042016) y empezó a revisar prioridades, ajustadas al mundo contemporáneo. Cuatro líneas nortearon su gestión: calidad; emprendedurismo; integración enseñanza, investigación, extensión; y relación con la sociedad.

Al cumplir 70 años de historia, el rector Hno. Evilázio Teixeira conduce una PUCRS robusta, legado de los rectores que lo antecedieron y donde reside una centella del sueño de los fundadores. En 2017, él lanzó el movimiento PUCRS 360° – Universidad en transformación, que busca más autonomía para los estudiantes durante su trayectoria universitaria, nuevos ejes formativos para una experiencia académica diferenciada y más espacios de convivencia y estudio en el Campus, como la Calle de la Cultura.

PUCRS en números

Cursos de grado: 55, con opciones de líneas de formación que amplían las posibilidades de elección de los estudiantes

Cursos de especialización: 88 en marcha

Maestría: 24

Doctorado: 22

Estudiantes (grado y posgrado) en 2018/1: 27.349

Diplomados hasta 2017/2 en el grado: 166.807

FUENTES: PROGRAD, PROPESQ Y EDUCON

Tecnopuc, 15 años de innovación

 

El Parque abriga 150 empresas y 6,5 mil personas

El Parque Científico y Tecnológico (Tecnopuc) cumple 15 años y lanza una meta audaz: atraer y generar mil nuevas startups en diez años. Prevista en el plan estratégico del área de Innovación y Desarrollo, refleja una tendencia de los principales ecosistemas de innovación del mundo.

El Parque abriga más de 150 organizaciones, entre gigantes globales, empresas nacionales, institutos y centros de investigación, además de diversos mecanismos de generación de emprendimientos, con más de 200 startups graduadas a lo largo de ese período. La más nueva integrante es la multinacional norteamericana Oracle, que empezó a operar en octubre.

En sus espacios, el Tecnopuc cuenta con más de 6,5 mil personas trabajando, en una estructura construida para generar sinergia entre las empresas y la Universidad. Además, posee convenios de colaboración e interacción con más de 150 países. Desde su fundación, en 2003, cuadriplicó su área construida, pasando de los iniciales 20 mil metros cuadrados para más de 90 mil.

Como una de las referencias latinoamericanas en ecosistemas de innovación, es el Parque Científico y Tecnológico más premiado y reconocido del País.

Nuevo aliento com CAPES/PRINT

Meta: aumentar el número de estudiantes extranjeros

La PUCRS tiene reconocimiento nacional e internacional por la calidad de la enseñanza ofrecida y relevancia científica, tecnológica y social de las investigaciones desarrolladas por su comunidad académica, figurando entre las mejores instituciones de América Latina en rankings internacionales. Posee convenios con universidades de Asia, África, Europa y América, volviendo posible la movilidad académica in y out y el establecimiento de convenios.

En agosto del 2018, fue contemplada, junto con otras instituciones, por el Programa Institucional de Internacionalización (Capes/ Print) de la Coordinación de Perfeccionamiento de Personal de Nivel Superior (Capes). Los recursos permitirán invertir en la creciente internacionalización del currículo, tanto del grado como del posgrado, estrategia utilizada para preparar los estudiantes a actuar profesionalmente en un mundo internacional y multicultural.

Transformación por la investigación

A lo largo de los últimos 20 años, la PUCRS fortaleció su investigación y elevó muchos de sus Programas de Posgrado al nivel internacional. Valoró la producción de conocimiento y comprendió que su papel va más allá de la formación de profesionales, incluye también la transformación de la sociedad, por medio de su posición estratégica de innovación y desarrollo.

La trayectoria de la investigación en la PUCRS sigue, con desafíos de un mundo cada vez más globalizado. La propuesta es volverse un ambiente internacional, consolidando los convenios en el exterior, recibiendo más investigadores de otros países y un número creciente de alumnos extranjeros. La conexión con el ecosistema de innovación, de forma que se prepare al alumno para un mercado que requiere habilidades de relación, liderazgo y emprendedurismo, es otro desafío.

Esos dos movimientos generaron el Plan de Internacionalización, que norteará las acciones de la Universidad en todas las áreas en los próximos cuatro años, y la Política de Innovación, que abre una serie de posibilidades para la cultura emprendedora y la generación de emprendimientos en el ambiente académico.

ALTO NIVEL

Programas de Posgrado: 24, siendo 11 con notas 6 y 7 en la Capes, lo cual demuestra expresión internacional

Proyectos de investigación en marcha: 1.700, siendo alrededor de 180 con convenios internacionales

Convenios internacionales: 233

Investigadores: cerca de 350

Becarios de productividad: 123 becarios CNPq, indicador de Excelencia en la investigación

Alumnos: alrededor de 2 mil

Iniciación científica: 611 becas para la inserción del grado en la investigación

Grupos de investigación: 354 grupos activos, lo cual pone la PUCRS en la primera posición de Brasil entre privadas y comunitarias, según el censo de 2016

Institutos de investigación: 4 (IMA, IPR, IGG e InsCer)

Centros de investigación: 17

Núcleos de investigación: alrededor de 60

Laboratorios: 120

UN CAMPUS PARA LA SALUD

Inter-institutional and multidisciplinary structures

Con aporte del Estado, la PUCRS invierte en el Campus de la Salud, iniciativa innovadora en el Sur de Brasil volcada hacia la enseñanza, la asistencia y promoción de la salud, de manera integrada y multidisciplinaria. El campus congrega las Escuelas de Ciencias de la Salud y Medicina, con otros seis emprendimientos: el Instituto del Cerebro del RS (InsCer), el Hospital São Lucas, el Parque Deportivo, el Centro de Rehabilitación, el Centro Clínico y el futuro Healthcenter Care, un centro de servicios diferenciados volcados hacia la salud y bienestar. De esa forma, reúne investigación, enseñanza y asistencia en la promoción y en la protección de la salud de la población. La Universidad valora aún más la estructura de esas unidades por medio de reformas, ampliaciones y construcciones, en la adquisición de equipos y en la calificación de la atención.

El vicerrector Jaderson Costa da Costa resalta que el Campus de la Salud es interinstitucional y multidisciplinario. Como uno de sus elementos, el InsCer ofrece soporte a todas las Escuelas, recibiendo alumnos de grado, de iniciación científica y de posgrado para conocer nuevas tecnologías. El Instituto dialoga con diversas áreas del conocimiento, como Letras, Teología y Filosofía, por medio de grupos de investigación y tendrá aún más posibilidades de interacción a partir de su ampliación, iniciada en setiembre.

InsCer ampliado

 

Nuevo edificio, tres veces mayor, quedará listo en 2020

El proyecto original del InsCer contempla su construcción en dos etapas. Con recursos de la Finep, ampliará el área de los actuales 2.549 metros cuadrados para 9.335 metros cuadrados y tiene la conclusión prevista para el 2020. Son nuevos laboratorios, equipos, consultorios, área para exámenes de punta y acogida. “Habrá un área clínica para atender a quienes forman parte de protocolo de investigación, como pacientes en tratamiento de Alzheimer o Parkinson y acompañantes de niños con problemas de aprendizaje, de lectura, o de desarrollo”, revela Jaderson Costa da Costa.

Para el vicerrector y director del InsCer, más importante que los equipos son los cerebros. “Podremos tener, simultáneamente, un número mayor de proyectos y ampliar el portfolio para más allá de las enfermedades neurológicas y neurooncológicas ya estudiadas”, prevé. Otro espectro de la investigación que se fortalece con la ampliación del espacio es la de biomarcadores, que anticipan la ocurrencia de enfermedades y permiten el diagnóstico más adecuado. Un área muy sensible a eso, la síntesis de nuevos fármacos, también ganará destaque.

INTERNACIONAL

La internacionalización es otro aspecto que se enriquece con la ampliación del InsCer, aumentando posibilidades de convenios. Con por lo menos diez convenios internacionales, interacciona con grandes centros de investigaciones en el mundo y tendrá más áreas para compartir y discutir proyectos.  “Esos convenios contribuirán para grandes descubrimientos que van a beneficiar a la población. Tenemos el compromiso de realizar investigación translacional, que culmine en la atención a todos los pacientes, del SUS (Sistema Único de Salud), del convenio y particular”, refuerza.